En medio del complejo juicio que enfrenta el expresidente Álvaro Uribe Vélez por presunta manipulación de testigos y fraude procesal, uno de los nombres que vuelve a resonar es el de Juan Carlos “el Tuso” Sierra, un personaje cuya trayectoria combina narcotráfico, paramilitarismo y colaboración judicial.
Sierra, originario de Andes, Antioquia, comenzó su carrera como ganadero, pero pronto se involucró con el crimen organizado, específicamente con la temida Oficina de Envigado. Su ingreso a las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) se dio de la mano de Diego Fernando Murillo, alias “Don Berna”, uno de los máximos jefes paramilitares del país. Don Berna lo presentó ante la cúpula paramilitar como un “amigo y financiador”, agregando que “a los financistas nuestros hay que protegerlos”.
Sin embargo, los mismos paramilitares se sorprendieron cuando descubrieron que Sierra se había hecho pasar por comandante del Bloque Héroes de Granada, lo que generó tensiones internas. Para 2006, el gobierno ofrecía una recompensa de 150 mil dólares por su captura. En mayo de ese año, el “Tuso” decidió entregarse voluntariamente en una estación de policía en Medellín. Para muchos, su entrega fue una jugada calculada para obtener beneficios del proceso de Justicia y Paz que lideraba el gobierno de Uribe.
No obstante, al conocerse que se había hecho pasar por paramilitar sin serlo realmente, el entonces presidente Uribe ordenó su expulsión del proceso en 2006. Dos años más tarde, Sierra fue extraditado a Estados Unidos, donde enfrentó cargos por narcotráfico. Aunque fue condenado a 10 años de prisión, solo cumplió cinco y quedó en libertad en 2013.
Durante su tiempo en Estados Unidos, el “Tuso” Sierra se convirtió en un testigo cooperante de la justicia estadounidense. Entregó una lista de políticos, miembros de la fuerza pública y empresarios que, según él, eran financiados por la Oficina de Envigado. Su colaboración fue valorada por las autoridades del país norteamericano y sirvió de insumo para investigaciones posteriores.
En Colombia, sus declaraciones han sido consideradas clave por algunos sectores de la justicia. De hecho, en 2018, su testimonio fue uno de los elementos que la Corte Suprema de Justicia tuvo en cuenta para ordenar la detención domiciliaria del expresidente Uribe, en medio del proceso por supuesta manipulación de testigos.
A pesar de la relevancia de su testimonio, muchos coinciden en que se trata de una fuente cuya credibilidad debe ser evaluada con cautela, debido a sus constantes cambios de bando y su pasado delictivo.
El juicio contra Álvaro Uribe sigue avanzando, y la figura del “Tuso” Sierra continúa siendo una pieza polémica y crucial en el rompecabezas judicial que enfrenta el expresidente.
