La adopción de animales rescatados se ha consolidado en Colombia como un ejemplo de solidaridad y responsabilidad social. Cada vez son más las figuras públicas que se suman a esta causa, visibilizando la importancia de ofrecer un hogar seguro a mascotas que han sido víctimas de maltrato o abandono.
Recientemente, el comediante y actor Alejandro Riaño compartió en sus redes sociales la emotiva noticia de la adopción de 'Barbas', un perro que había sido utilizado como carnada para tiburones en Buenaventura, Valle del Cauca.
Barbas fue rescatado por la fundación Huellas de Amor, con sede en Pereira, organización que trabaja en la protección, rehabilitación y reintegración de animales en situación de vulnerabilidad.
“Hoy nos llegó un nuevo integrante a la familia, llegó Barbas, un perro que la fundación rescató de ser utilizado como carnada para tiburones. Si quieren darle una vida con mucho amor, vayan a la fundación, que hay muchos perros más en busca de un buen hogar”, escribió Riaño en Instagram, invitando a sus seguidores a reflexionar sobre la adopción responsable.
Además, el refugio compartió imágenes del proceso de preparación de Barbas para su nuevo hogar, con el apoyo de Petboost Colombia, que le proporcionó cuidados especiales y un detalle especial; un corbatín para su encuentro con su nueva familia.
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A la causa también se sumó Alejandra Giraldo, presentadora de Noticias Caracol y reconocida defensora del bienestar animal, quien adoptó a 'Salvatore', un perro rescatado del abandono en El Cocuy, Boyacá.
Originalmente llamado Napoleón y con aproximadamente un año de edad, Salvatore fue trasladado a Bogotá gracias a la coordinación entre rescatistas locales y Divinita Shoes, marca que apoya iniciativas de bienestar animal. Tras su llegada, Giraldo y su familia decidieron cambiarle el nombre, marcando el inicio de una nueva etapa llena de esperanza.
“Ha habido días increíbles y otros no tanto. Sabemos que falta un largo camino, pero todos, con amor y mucha paciencia, estamos reaprendiendo. El amor salva y nos hace sonreír”, escribió Giraldo.
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Cientos de internautas han celebrado estos gestos en redes sociales, resaltando la generosidad y sensibilidad de Riaño y Giraldo. Sus acciones envían un mensaje claro: la adopción no solo implica ofrecer un techo, sino brindar amor, segundas oportunidades y cuidado, transformando vidas de manera significativa.
Hoy, Barbas y Salvatore disfrutan de hogares llenos de cariño, recordando que la adopción responsable salva vidas y contribuye a fomentar una cultura de empatía, respeto y compromiso con los animales en Colombia.
