
Las lesiones no dejan de ser un dolor de cabeza para el Tottenham.
De acuerdo a las declaraciones del portugués Jose Mourinho, técnico del cuadro londinense, esa ha sido una de las razones que ha afectado el nivel deportivo del equipo en el ámbito local e internacional.
El último hombre que se sumó a la larga lista de jugadores hospitalizados fue el colombiano Dávinson Sánchez, quien horas previas al encuentro ante RB Leipzig, por el juego de vuelta de los octavos de final de la Champions League, presentó problemas físicos.
Noticia que de inmediato perjudicó los planes del estratega luso.
"Preparamos el juego de cierta manera y luego, un par de horas antes, descubrí que Dávinson Sánchez tampoco podía jugar. Es bastante malo para cualquiera y no creo que nadie pueda resistir tal situación", señaló al término del encuentro.
Además de Sánchez, el centro médico del Tottenham está integrado por Sissoko, Kane, Son, Bergwijn, Ben Davies y Foyth.
La serie ante los alemanes concluyó con un global de 4-0 en contra y con la eliminación temprana del onceno inglés del torneo de clubes más importantes del continente europeo.
Un resultado que encendió las alarmas en el Tottenham, luego de haber sido uno de los protagonistas al ser uno de los finalistas de la temporada pasada, bajo la dirección técnica del argentino Mauricio Pochettino.
Según los medios ingleses, la lesión que sufrió el defensa colombiano no es de mayor preocupación. Sin embargo, su presencia para el juego frente a Manchester United, por la fecha 30 de la Premier League, estaría en duda.
Por el momento, Tottenham se encuentra fuera de los torneos internacionales de la próxima temporada, debido a que se ubica en la octava posición de la tabla de posiciones. A cuatro puntos de la zona de clasificación a la Europa League, y a siete unidades de la Champions.