
Desde el Distrito se informó de un presunto caso de violencia sexual en contra de una niña de cuatro años, perteneciente a la comunidad indígena Emberá, el pasado 1 de junio. El hecho se dio específicamente en el alojamiento temporal de La Rioja, en Bogotá.
Según los reportes dados por la comunidad, las familias estaban compartiendo, cuando un hombre en visible estado de alicoramiento, presuntamente habría intentado abusar de la niña.
La mamá de la menor reaccionó de inmediato antes que sucediera un acceso carnal violento en contra de la menor, y puso de inmediato en evidencia la situación acudiendo al puesto de salud de La Rioja. Justo después de este acto, según testimonios recogidos por el Distrito de algunos testigos, el mismo hombre intento llevarse a otra menor de tan solo nueve años a la fuerza, acto que fue impedido por la comunidad. El hombre retiro del lugar justo después de esto.
Después de que se diera a conocer el presunto intento de abuso sexual, la Secretaría de Salud activó la ruta correspondiente para el debido acompañamiento a la niña de 4 años al hospital San Blas, donde estaría recibiendo atención, valoración y verificación del suceso, protegiendo la integridad de la menor y la de su familia.
Además, señalan que el caso se puso en conocimiento del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar ICBF, para que se proceda con la verificación de derechos y aperture el proceso de restablecimiento de los que hayan sido vulnerados.
Por otra parte, la Secretaría avanza en la imposición de la denuncia ante la Fiscalía. Ante estos actos, desde el ente gubernamental han rechazados los actos de manera contundente y reiteran el compromiso en la protección de todas las niñas, niños y adolescentes que pertenecen a esta comunidad.
Más actos de violencia a jóvenes Emberá
El pasado fin de semana, se hizo viral en redes sociales el video de una joven perteneciente a esta misma comunidad, en la que se ve colgada, mientras dos hombres le pegan en diferentes partes de su cuerpo, según esto, como parte de un castigo a la menor.
El hecho se presentó al interior de la comunidad indígena Emberá Chamí, en el municipio de Pueblo Rico, al occidente de Risaralda, ante estos hechos, la defensoría del pueblo expresó su rechazo.
Según relata la defensora, iris Marín Ortiz, "hemos confirmado con el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar que la niña se encuentra estable, sin fracturas internas y bajo atención especializada".
De paso, Marín condenó contundentemente los hechos y calificó la situación como una grave agresión y manifestación de violencia sistemática, que, lamentablemente, se presenta en distintas culturas y contextos, por lo que insistió en la necesidad de garantizar los derechos de los niños, niñas y adolescentes sin excepciones.
"Lo que ha ocurrido con la niña indígena del pueblo Emberá, en Risaralda, que fue víctima de violencia física, no es solo un hecho aislado ni un caso excepcional, es la manifestación de una violencia estructural y sistemática que atraviesa a la niñez y a las mujeres en todas las culturas, en todos los territorios y en toda la sociedad", indicó la defensora.