El reciente nombramiento de Alfredo Saade como nuevo jefe de gabinete del presidente Gustavo Petro ha generado una intensa controversia en el panorama político colombiano. Con su hoja de vida ya publicada en la página oficial de aspirantes de la Presidencia, el pastor cristiano y excandidato presidencial se posiciona como una de las figuras más cercanas al mandatario dentro del círculo de poder del Pacto Histórico.
¿Quién es Alfredo Saade?
Alfredo Saade es conocido tanto por su activismo religioso como por su participación política. Líder cristiano, fue candidato presidencial en 2022 por el movimiento Levantémonos y luego se unió al entonces candidato Gustavo Petro para movilizar el apoyo de pastores evangélicos a nivel nacional. Desde entonces, ha fungido como un articulador clave del respaldo religioso al proyecto petrista.
Además de su participación en la campaña, Saade ocupó cargos con proyección política, como su rol dentro de la Dirección de Asuntos Religiosos del Ministerio del Interior y una cuestionada dirección del Instituto de Gestión del Agua en La Guajira, cargo que dejó tras la caída del decreto de emergencia económica en ese departamento.
Las polémicas en torno a su gestión pública
La llegada de Saade al gabinete presidencial no solo levanta inquietudes por su perfil ideológico y religioso, sino también por los cuestionamientos éticos y legales que enfrenta. Uno de los episodios más sonados fue su vinculación con la administración de Olmedo López en la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD). Saade había sido contratado para fortalecer el programa de ollas comunitarias en La Guajira, sin embargo, la Procuraduría General de la Nación le abrió una indagación preliminar por presuntas irregularidades en la ejecución del contrato.
Según la entidad de control, Saade habría justificado el cumplimiento de sus tareas presentando un informe ya entregado por otro contratista, lo que pone en entredicho su idoneidad para manejar recursos públicos.
Posiciones radicales y cercanía con Petro
Más allá de los cuestionamientos administrativos, Alfredo Saade ha protagonizado intervenciones públicas que han sido calificadas como radicales. Durante un cabildo popular en Barranquilla, en mayo de 2025, pidió públicamente al presidente Petro que cerrara el Congreso de la República, argumentando que ese órgano había "robado la plata de los pobres". En la misma intervención, habló de la necesidad de que el mandatario se reelija, pese a que la Constitución colombiana prohíbe la reelección presidencial.
Estas declaraciones encendieron las alarmas en diversos sectores políticos y sociales que las interpretan como una amenaza al equilibrio institucional y a la democracia.
¿Qué implica su nombramiento?
El ministro del Interior, Armando Benedetti, aseguró que confía en Saade y que su cercanía con el presidente Petro es un activo. Sin embargo, para muchos analistas, el nombramiento del pastor representa un giro en la conformación del alto gobierno, que se aleja de perfiles técnicos o con trayectoria administrativa consolidada, y se orienta hacia aliados políticos y leales ideológicos.
Saade no solo representa una visión religiosa conservadora dentro del Gobierno, sino que también simboliza una estrategia de consolidación del poder político y simbólico del petrismo, reforzando la narrativa de cercanía con “el pueblo” y sectores populares, especialmente del ámbito evangélico.
Reacciones y futuro
La oposición ya ha expresado su preocupación por lo que considera un debilitamiento de la institucionalidad. Varios congresistas han anunciado que solicitarán debates de control político sobre la idoneidad del nombramiento. También se espera que la Procuraduría y otras entidades de control sigan investigando los contratos pasados del nuevo jefe de gabinete.
Mientras tanto, desde el oficialismo, algunos ven en Saade un actor leal capaz de fortalecer el proyecto de Gobierno desde dentro. “Es una figura que representa los valores que muchos seguidores del presidente defienden”, argumentan.
El tiempo dirá si el nombramiento de Alfredo Saade responde a una estrategia de consolidación política efectiva o si terminará siendo un peso para la gobernabilidad del presidente Petro. Por ahora, el país observa con atención este nuevo capítulo de una administración que sigue apostando por figuras no convencionales en el poder.
