
La senadora María José Pizarro oficializó este lunes su candidatura a la Presidencia de la República con miras a las elecciones de 2026. El anuncio se realizó en el Teatro Panorama de Bogotá, donde cerca de las 7 p.m. comenzaron los discursos, cánticos y mensajes que marcaron el inicio de su campaña.
Hija del excomandante del M-19 y excandidato presidencial Carlos Pizarro Leongómez, asesinado en 1990, María José ha emergido como una de las figuras más influyentes del petrismo en el Senado. Se ha destacado como defensora férrea del proceso de paz, los derechos humanos y las causas sociales más sensibles del país.
Pizarro será una de las aspirantes en la consulta interna del Pacto Histórico prevista para octubre de 2025, donde compartirá tarima con Gustavo Bolívar, Camilo Romero, Susana Muhamad y Gloria Flórez. De ese proceso saldrá el nombre que representará a la coalición en la consulta del Frente Amplio, prevista para marzo de 2026, y que definirá la candidatura unificada del bloque progresista.
Durante su intervención, la senadora exclamó con fuerza la consigna: “¡No pasarán!”, seguida por el público que coreaba al unísono. “La Colombia nueva ya está en marcha gracias a nuestro primer gobierno del cambio”, afirmó, enviando un claro mensaje de continuidad con el legado del presidente Gustavo Petro.
No escatimó críticas a las élites económicas ni a los sectores que, según ella, han ignorado históricamente a las poblaciones más excluidas. También subrayó la urgencia de una reforma educativa profunda y elogió al senador Iván Cepeda, destacando su compromiso con la verdad como principio político.
En tono confrontativo, lanzó dardos directos a la derecha, a la que acusó de recurrir a “fraudes procesales y violencia”, reforzando su postura crítica frente a ese espectro ideológico.
La oficialización de su candidatura plantea varias preguntas cruciales: ¿Será María José Pizarro una extensión del proyecto de Petro o abrirá un nuevo capítulo dentro del progresismo? ¿Cómo impactará su postulación en un proceso de paz que aún genera incertidumbre?
Con este paso, Pizarro entra con fuerza en una contienda que promete redefinir el rumbo del país y reabrir el debate sobre el verdadero alcance del cambio prometido.