
La disputa entre Shakira y Gerard Piqué continúa siendo un tema de interés constante para los medios y seguidores de la famosa expareja. En los últimos años, los dos han estado enfrentados en una batalla legal por los tiempos que pasan con sus hijos, Milán y Sasha, así como por la propiedad que comparten en Esplugues de Llobregat, una de las zonas más exclusivas de Barcelona. Sin embargo, ahora parece que la tensión ha aumentado aún más, con un nuevo desacuerdo económico que involucra cifras millonarias.
Según el periodista Jordi Martin, quien ha seguido de cerca el caso, el conflicto más reciente se centra en una disputa por la mansión en Barcelona y una solicitud económica de la estrella pop. Ella estaría pidiendo una compensación de 12 millones de euros, lo que equivaldría a alrededor de 53 mil millones de pesos colombianos. Por otro lado, el exfutbolista propuso ofrecer una cifra de 6 millones de euros, es decir, unos 26 mil millones de pesos colombianos.
Además, el también paparazzo revela que Piqué solicitó que de esos 6 millones de euros, 3 millones sean destinados a fines personales, como la construcción de una nueva casa cerca de Barcelona, donde planea radicarse junto con Clara Chía.
Este nuevo conflicto surge tras años de tensiones que comenzaron cuando Shakira y Piqué decidieron separar sus caminos en 2022. Aquel año, la relación de la expareja se quebró tras la revelación de la infidelidad del exfutbolista, algo que Shakira descubrió en un momento especialmente difícil: mientras su padre, William Mebarak Chadid, estaba en un centro médico tras una recaída. La cantante barranquillera confesó que se enteró de la traición al ver noticias sobre el tema en los medios, lo que complicó aún más una situación emocionalmente desgastante para ella.
Tras este doloroso descubrimiento, Shakira decidió dar un giro a su vida y llevar a sus hijos lejos de España. En 2023, publicó un emotivo mensaje en su cuenta de Instagram, agradeciendo a todos por el tiempo que vivió en Barcelona, pero anunciando que debía tomar nuevos caminos. Fue entonces cuando la cantante tomó la decisión de mudarse a Miami, un cambio significativo tanto para ella como para sus hijos.
Antes de su mudanza, Shakira y Piqué llegaron a un acuerdo sobre los tiempos de visita que el exfutbolista tendría con los niños. De esta manera, Piqué podría ver a Milán y Sasha en diferentes épocas del año, lo que permitió cierta armonía en la relación coparental, a pesar de la difícil separación.
Ahora, la disputa por el dinero y la mansión en Barcelona sigue siendo un tema delicado. La cifra de 12 millones de euros solicitada por Shakira refleja la complejidad de la separación y las implicaciones económicas que implica la división de bienes de una pareja tan conocida. Mientras tanto, la batalla legal por la mansión y otros aspectos relacionados con su vida familiar parece estar lejos de terminar, dejando claro que, a pesar de sus vidas separadas, Shakira y Piqué aún tienen que resolver importantes detalles.