
Los gatos pueden mostrarse esquivos y ariscos, pero no siempre es solo cuestión de carácter. Existen cosas que sus dueños suelen hacer pensando en que a los felinos les agrada pero, a menudo, solo les causa disgusto y confusión.
Estos animales suelen ser las mascotas más adoradas e interesantes para los seres humanos por su comportamiento independiente, tranquilo, impredecible y fiel. Sin embargo, pueden ocurrir cosas que les tornan en criaturas agresivas y pueden llegar a sacar las uñas y dientes para defenderse.
Aunque no aplica para todos los felinos, la mayoría no soportan algunas costumbres que tienen sus amos y es importante saber que los puede poner de mal humor.
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Para los gatos, las uñas son una herramienta muy importante en su fisiología, ya que con ellas pueden trepar árboles o defenderse de algún enemigo en caso de que salgan al exterior a explorar. Si el animal vive solo en el interior, el cortarles las uñas es una buena forma para proteger los muebles de la casa o la piel de los niños que juegan con ellos. Aún así, puede desatarse una confrontación.
Expertos recomiendan que se les puede engañar con comida o aprovechar cuando estén durmiendo, siempre utilizando un buen cortauñas que no los lastime.
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Especialistas de la clínica veterinaria Gattos en Madrid indican que la zona de la panza es muy vulnerable para un gato y que se puede malinterpretar la costumbre de estos animales al acostarse boca arriba.
"Muchos dueños interpretan que el gato se pone panza arriba para que se la toquen y es todo lo contrario: esta postura suele manifestar excitación o ganas de juego, por lo que el resultado podría ser un mordisco o un arañazo”, señalan los expertos.
Cortarle las uñas
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Rascarle la barriga
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