Eres lo que comunicas. Ninguna entidad, organismo, institución, marca personal, puede distanciarse de esta posibilidad, deben mirar más allá del aquí y ahora. Comunicar bien en la administración pública es el camino.
Según el consultor español Antoni Gutiérrez Rubí, ´En las sociedades mediáticas contemporáneas, la comunicación ya no se entiende como una opción, sino como una obligación fundamental para cualquier institución. La comunicación es el puente que conecta a las organizaciones con sus usuarios, clientes y la sociedad en general. Las entidades deben ser visibles y comprensibles para el público, conocer qué hacen, cómo lo hacen y por qué lo hacen´
Es esencial que las instituciones comuniquen de manera clara, eficiente y constante. Sin embargo, muchas veces se confunde el acto de comunicar con otros procesos como informar o divulgar. Comunicar es un proceso integral que va más allá de la transmisión de información; se trata de construir una relación con los ciudadanos, generar confianza y asegurar que el mensaje llegue de forma efectiva y persuasiva. Informar, por otro lado, es solo una parte del proceso comunicativo, que se limita a entregar datos específicos. Divulgar, en cambio, implica diseminar información con fines educativos o de conocimiento, pero también con el objetivo de influir y promover cambios.
La experta María José Canel, define la comunicación como el conjunto de reglas, principios y procedimientos con intención persuasiva, con el propósito de influir en las audiencias.
La brevedad y la simplicidad son clave en la comunicación institucional. En un mundo saturado de información, el público no tiene tiempo ni paciencia para mensajes largos o complicados. El reto es ser claros y directos, sin perder la profundidad ni el propósito del mensaje.
Los ciudadanos deben entender, en pocos segundos, qué les ofrece la institución, cómo pueden acceder a ello y por qué es relevante para ellos. Las corporaciones deben evitar el lenguaje técnico o los mensajes ambiguos que puedan generar confusión o desconfianza.
Hoy en día, los multiformatos son indispensables para comunicar eficazmente. Las plataformas digitales, las redes sociales, los videos, los podcasts, las infografías y los comunicados escritos son solo algunas de las herramientas utilizadas para llegar a diversos públicos. Cada medio tiene sus características y, por tanto, requiere enfoques diferentes.
La estrategia digital se ha convertido en un pilar fundamental para la comunicación institucional. Los usuarios esperan poder acceder a información en cualquier momento y desde cualquier lugar. Tener una presencia sólida y coherente en redes, no solo permite ser más visibles, sino que también facilita la interacción directa con los ciudadanos.
No obstante, la comunicación institucional no puede limitarse a una emisión unilateral de mensajes. La retroalimentación de los ciudadanos es esencial para garantizar que las acciones comunicativas sean efectivas. Deben estar dispuestas a escuchar y adaptarse a las necesidades, dudas y críticas de la sociedad. La interacción y el feedback son fundamentales para mantener una relación fluida y constructiva, ya que permiten ajustar los mensajes y las estrategias comunicativas en tiempo real.
Comunicar bien es un proceso integral que requiere claridad, simplicidad y una estrategia adaptada a los tiempos actuales. Las instituciones deben ser conscientes de que no solo deben existir, sino también ser comprendidas y reconocidas por la sociedad. En este sentido, lo que se comunica es tan importante como lo que se hace. Las instituciones son lo que comunican, y la forma en que lo hacen puede determinar su éxito en la gestión pública.