
El 23 de marzo de 2025, el municipio de CravoNorte, en el oriente de Arauca, se vio sacudido por la desaparición de Gabyela Leonela Santana, una niña de 9 años originaria de Venezuela.
Su desaparición dejó a su familia y a la comunidad sumidos en una angustia indescriptible que terminó en un hallazgo trágico el 25 de marzo, cuando el cuerpo sin vida de la menor fue encontrado flotando en las aguas del río Casanare, específicamente en el sector Palmarito.
Un desesperado llamado a la acción: la lucha de una madre
Alejandra Lucela, la madre de Gabyela, relató su desgarrador testimonio en el programa 10AM de Caracol Radio, donde detalló cómo se enteró de la desaparición de su hija. Según su relato, fue su segunda hija quien le informó que un hombre borracho había raptado a Gabyela:
"Mami, se llevaron a Gabyela. Un borracho que estaba en la casa." Alarmada y sin dudarlo, Alejandra salió a buscarla, adentrándose en el bosque. En medio de su angustia, la comunidad local se unió en la búsqueda de la niña. Sin embargo, la respuesta de las autoridades fue tardía. La policía, según la madre, no hizo nada en el momento. “Lo único que dijeron fue que estaban almorzando y no hicieron nada. Llegaron a las 3:30 de la tarde”, recordó Alejandra, visiblemente afectada.
La búsqueda continuó durante todo el fin de semana, hasta que finalmente, el cuerpo de Gabyela fue hallado en el río Casanare, en el sector de Las Palmitas, a orillas del río. La madre destacó la inacción de la policía, que no había emprendido una búsqueda efectiva en los primeros momentos del suceso. "La Guardia no hizo nada", afirmó, agradeciendo a la comunidad de CravoNorte por su apoyo en la localización del cuerpo de su hija.
La noticia de la desaparición y posterior hallazgo del cuerpo de Gabyela conmovió profundamente a los habitantes de CravoNorte.
Vecinos del lugar informaron a las autoridades que, antes de su desaparición, vieron a un hombre conversando con varias menores, entre ellas Gabyela. Sin embargo, hasta el momento, el sospechoso del secuestro y asesinato de la niña no ha sido identificado formalmente por las autoridades.
La comunidad señala que el hombre estuvo merodeando durante varias horas antes de cometer el crimen y que ya había sido visto previamente en la zona, lo que plantea dudas sobre su identidad y antecedentes.
Las autoridades, por su parte, han asegurado que las investigaciones están en curso y que ofrecen hasta 15 millones por información. El comandante de la Policía de Arauca confirmó que ya se están llevando a cabo operaciones para localizar y capturar al responsable del crimen. Las unidades de la Sijín (Seccional de Investigación Criminal) y el CTI (Cuerpo Técnico de Investigación) están colaborando en la búsqueda del sospechoso. Aunque el caso está bajo investigación, la falta de avances inmediatos en la identificación del criminal ha generado una gran preocupación en la comunidad.
El asesinato de Gabyela Santana pone de manifiesto una serie de problemáticas sociales y de seguridad que afectan a regiones como Arauca, especialmente en áreas rurales o fronterizas, donde la presencia del Estado y las autoridades de seguridad pueden ser limitadas. Además, este caso resalta la creciente preocupación por la vulnerabilidad de los niños en situaciones de violencia y abuso, particularmente en contextos de alta informalidad social y económica.
La denuncia de la madre de Gabyela también ilustra las dificultades que enfrentan las comunidades en su lucha por obtener justicia, cuando las respuestas de las autoridades no son inmediatas o adecuadas ante hechos tan graves. Este caso no solo es un llamado de atención sobre la violencia que aqueja a los más vulnerables, sino también una crítica al sistema de seguridad y justicia en regiones donde la impunidad parece prevalecer.
Mientras tanto, la familia de Gabyela y la comunidad de CravoNorte esperan que el crimen no quede impune. La madre de la niña, quien ha vivido días de dolor indescriptible, ha expresado su deseo de ver al responsable de la muerte de su hija tras las rejas.