La violencia vuelve a estremecer al país. En la tarde del martes 10 de junio, el fiscal Karin Sefair Calderón fue asesinado en el parqueadero del centro comercial Las Palmas, ubicado en Fusagasugá, Cundinamarca. Las autoridades ya confirmaron que el funcionario no estaba solo al momento del ataque: un constructor lo acompañaba y se convirtió en el principal testigo del crimen.
El hecho ha generado conmoción no solo por la figura de la víctima, quien era coordinador de la Fiscalía en esa ciudad, sino también por las circunstancias en las que ocurrió el asesinato, que todavía generan múltiples hipótesis.
¿Qué se sabe del acompañante del fiscal?
Fuentes de la investigación confirmaron que Karin Sefair Calderón estaba en compañía de un constructor con quien tenía una relación profesional. Según testigos y grabaciones de seguridad, ambos se encontraban en el centro comercial Las Palmas cuando el fiscal se dirigió a un cajero automático. Minutos después, en el parqueadero, recibió varios impactos de bala que acabaron con su vida. Su acompañante salió ileso y ahora es una pieza clave en el desarrollo de la investigación.
Las autoridades han protegido la identidad del constructor mientras avanza el proceso, y su testimonio podría esclarecer si el asesinato fue producto de un intento de fleteo —un robo violento tras un retiro de dinero— o si, por el contrario, tiene relación con los casos judiciales que lideraba el fiscal.
Posibles móviles del asesinato
Aunque inicialmente se especuló con un caso de fleteo, los antecedentes del fiscal Karin Sefair Calderón abren otra línea de investigación: su labor como funcionario judicial le habría generado enemigos. Según reveló la unidad investigativa de El Tiempo, uno de los expedientes que tenía a su cargo involucraba a un funcionario judicial investigado por presuntas amenazas y faltas disciplinarias.
Además, la Fiscalía no ha descartado que el crimen esté relacionado con algún caso de alto impacto que el fiscal hubiera manejado recientemente. Esta hipótesis toma fuerza, dado que los sicarios actuaron con precisión, lo que sugiere un posible crimen planeado con antelación.
Recompensa y medidas de seguridad
En respuesta inmediata al asesinato, la Alcaldía de Fusagasugá convocó un consejo de seguridad extraordinario y ofreció una recompensa de 50 millones de pesos a quien brinde información que permita capturar a los responsables. También se intensificó la vigilancia en puntos estratégicos de la ciudad y se están analizando las grabaciones de cámaras de seguridad del centro comercial y alrededores.
¿Quién era Karin Sefair Calderón?
Con 49 años, el fiscal Sefair Calderón tenía una reconocida trayectoria en el sistema judicial colombiano. Inició su carrera como oficial mayor en Cundinamarca y en 2009 fue nombrado juez. Trabajó en regiones complejas como Florencia y Puerto Rico (Caquetá), y también en municipios como Funza, Sopó y Girardot.
Su compromiso con la legalidad y su experiencia lo llevaron a ocupar el cargo de coordinador de la Fiscalía en Fusagasugá, donde lideró casos sensibles y de alto perfil.
El asesinato de Karin Sefair se suma a otros hechos recientes que han puesto en la mira la seguridad de los funcionarios judiciales en Colombia. En menos de un mes, varios casos de sicariato han sacudido la opinión pública, incluyendo el atentado contra Miguel Uribe, aún sin resolver.
La Fiscalía General de la Nación no ha emitido un pronunciamiento oficial sobre avances en la captura de los responsables, pero reiteró su compromiso con el esclarecimiento del caso y la protección de sus funcionarios.
