
El norte de Bogotá fue escenario de un violento episodio que ha generado preocupación entre los habitantes de la capital. El pasado miércoles 5 de junio, a plena luz del día, un hombre fue asesinado a tiros en un restaurante del exclusivo sector de Santa Bárbara, en la localidad de Usaquén.
Las autoridades confirmaron que la víctima es Jaime Murcia Pinzón, presunto hijo de un reconocido empresario del sector ganadero y, según versiones preliminares, con posibles vínculos con el negocio de las esmeraldas.
Un crimen a plena luz del día
El hecho ocurrió hacia la 1:00 p.m. en la carrera 11D con calle 118A – 95, una zona altamente transitada y cercana al centro comercial Unicentro. La víctima se encontraba dentro de una pastelería cuando un hombre armado ingresó al lugar y le disparó en repetidas ocasiones. La escena fue caótica: los disparos causaron pánico entre los comensales y trabajadores del lugar, y los vidrios del establecimiento quedaron completamente destrozados.
De inmediato, unidades de la Policía Metropolitana de Bogotá y el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) acudieron al lugar para asegurar la escena, realizar el levantamiento del cadáver e iniciar las investigaciones correspondientes. El teniente coronel Ricardo Chaves, comandante de la Estación de Policía Usaquén, indicó que no se descarta ninguna hipótesis: tanto un ajuste de cuentas como un posible intento de robo están siendo considerados.
¿Quién era Jaime Murcia Pinzón?
Según información revelada por Semana, el hombre asesinado sería Jaime Murcia Pinzón, hijo de un adinerado empresario colombiano con negocios en la ganadería. Además, distintas fuentes no oficiales lo vinculan al mundo de las esmeraldas, un sector históricamente asociado con disputas de poder, conflictos armados y rivalidades empresariales.
Aunque las autoridades no han confirmado dicha relación con el gremio esmeraldero, no se ha descartado que el móvil del crimen esté relacionado con disputas dentro de ese ámbito. Cabe recordar que los conflictos por el control del comercio de esmeraldas han generado numerosos episodios de violencia en el pasado reciente del país.
Testigos y reacciones de la comunidad
El crimen ocurrió en una zona comercial muy concurrida, lo que provocó gran conmoción entre los ciudadanos. Videos grabados por transeúntes circularon rápidamente en redes sociales, mostrando el caos posterior al ataque. Uno de los empleados del restaurante, en declaraciones recogidas por El Tiempo, describió a Murcia Pinzón como una persona cercana y habitual en el lugar:
"Él era un señor muy querido, muy conocido. Venía con frecuencia y se sentaba aquí y hablaba con nosotros."
Las voces de alarma no se hicieron esperar. Vecinos y comerciantes del sector expresaron su preocupación por el incremento de los hechos violentos en la zona. De acuerdo con testimonios recopilados por medios locales, no es la primera vez en 2025 que se registran asesinatos en Usaquén, lo que ha motivado llamados urgentes a reforzar la presencia policial y a implementar medidas de seguridad efectivas.
Investigación en curso
El CTI trasladó el cuerpo a Medicina Legal para los exámenes forenses, mientras los investigadores analizan grabaciones de cámaras de seguridad y recopilan declaraciones de testigos. Hasta el momento, los autores del crimen no han sido identificados, y los atacantes lograron escapar sin dejar rastros aparentes.
El caso de Jaime Murcia Pinzón pone nuevamente en el centro del debate la seguridad en Bogotá y el alcance del crimen organizado en zonas tradicionalmente consideradas seguras. Las autoridades han prometido resultados en la investigación, mientras la ciudadanía exige respuestas y mayor acción ante la creciente ola de violencia urbana.