
En el reciente consejo de ministros, el presidente Gustavo Petro no dudó en expresar su frustración y arrepentimiento por las decisiones que tomó al inicio de su mandato, especialmente en relación con su gabinete. Estas declaraciones han generado una gran atención en el ámbito político y en la opinión pública, debido a su tono de autocrítica y los duros señalamientos hacia varios exministros que fueron parte clave de su gobierno.
Una estrategia para unificar el espectro político
Petro asumió la presidencia de Colombia con la promesa de liderar un cambio estructural en el país. Para lograr este objetivo, buscó una estrategia de integración y unificación de sectores políticos que, en teoría, aportarían a la estabilidad y viabilidad de sus reformas. Dentro de este plan, figuras como José Antonio Ocampo, Alejandro Gaviria y Cecilia López fueron incorporadas a su gabinete. Ocampo fue nombrado ministro de Hacienda, Gaviria ocupó el Ministerio de Educación y López fue designada ministra de Agricultura.
Según el presidente, su intención era integrar a estos políticos para fortalecer el apoyo a sus reformas, abriendo el espectro político a diversas ideologías.
Sin embargo, con el paso del tiempo, Petro ha cuestionado esta decisión, asegurando que su estrategia fue un error. En una conversación con su gabinete, el mandatario afirmó que su intención de ser generoso con figuras que habían perdido en las elecciones fue un "engaño" y una ingenuidad política. "Es como verle la cara de pendejo a uno", manifestó Petro, enfatizando la falta de contribuciones efectivas por parte de estos exministros en la concreción de las metas de su gobierno.
El arrepentimiento por las decisiones iniciales
Petro también admitió sentirse como un "novato" en los primeros meses de su presidencia, lo que podría haber influido en sus decisiones y en la conformación de su gabinete.
Esta autocrítica llegó después de que muchos de sus seguidores y opositores cuestionaran su manejo de la administración pública. A través de sus palabras, el presidente reflejó una sensación de inexperiencia, lo que lo llevó a tomar decisiones que posteriormente consideró erróneas.
El mandatario también aprovechó para reflexionar sobre la influencia de su antecesor, Juan Manuel Santos, en su llegada a la presidencia. Según Petro, Santos "me dejó con la posibilidad de llegar solo una sola vez a la presidencia", haciendo referencia a la reforma que eliminó la posibilidad de reelección en Colombia, una medida que el presidente mencionó con cierto grado de resentimiento.
La crítica a Alejandro Gaviria: más allá de la educación
Uno de los momentos más fuertes de la intervención de Petro fue la crítica a Alejandro Gaviria, exministro de Educación. Durante su periodo como candidato presidencial, Gaviria había adoptado una postura política distante de Petro y sus propuestas. El presidente no solo cuestionó su ideología, sino que también lo señaló por su desempeño en el Ministerio de Educación, afirmando que "eso se parece al Centro Democrático" y que Gaviria estaba más cerca de la derecha política que de su propia visión progresista.
Además, Petro afirmó que Gaviria, quien había sido rector de la Universidad de los Andes, nunca pensó en la educación en términos profundos y estratégicos, sino que siempre priorizó su visión en torno a la salud. Esta crítica es un reflejo claro de la profunda decepción del presidente con la figura de Gaviria, quien fue una de las personalidades políticas más relevantes en el inicio de su gobierno.
En medio de este panorama de autocrítica y tensiones internas, Petro también se refirió a un tema de actualidad: la transmisión de los consejos de ministros en medios de comunicación. En un contexto en el que el Consejo de Estado evaluó una tutela que busca limitar la difusión de estos eventos gubernamentales, Petro expresó su preocupación por el futuro de la democracia informativa en Colombia.
El mandatario defendió el pluralismo informativo y el derecho a la verdad, señalando que la resolución del Consejo de Estado podría poner en vilo la libertad de los colombianos para acceder a la información sobre el gobierno. Este tema también ha generado debate, especialmente entre los medios de comunicación, quienes verían afectadas sus fuentes de ingresos por la falta de contenido público relacionado con el Ejecutivo.